- 340 g de garbanzos
- 2 dientes de ajo
- 3 puerros
- 1 patata
- Mantequilla
- Parmesano
- Caldo de pollo o verduras
- Sal
- Pimienta
- Aceite de oliva
Elaboración:
- Hervir con agua los garbanzos y echar unos trozos de patata para que se ablande la piel. Cocer durante 40 minutos e ir quitando la espuma que aparece.
- En otra olla poner un chorreón de aceite de oliva, una nuez de mantequilla y dos dientes de ajo pelados. Freír lentamente.
- Lavar los puerros y cortarlos en brunoisse, hacerlos lentamente junto a la preparación anterior.
- Escurrir los garbanzos y echar en la olla con los puerros. Remover y verter un vaso de caldo. Cocer a fuego lento unos 15 minutos.
- Coger la cuarta parte del contenido y triturarlo para luego añadirla de nuevo, esto dará más consistencia.
- Añadir más caldo si es necesario y un par de puñados de queso parmesano rallado.
- Servir en cuencos con un chorrito de aceite de oliva y un poco de parmesano.
Los garbanzos se dejan la noche anterior en agua para que se ablanden.
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